Por fin has entrado en un estado de flujo y te lo estás pasando en grande creando ritmos cuando se produce el desastre: tu ordenador se congela o, peor aún, tu DAW se bloquea por completo, destruyendo potencialmente todos tus progresos recientes. En muchos casos, este frustrante fenómeno se debe a una carga excesiva de la CPU.
Mantener la CPU de tu DAW a un nivel razonable te garantiza que podrás producir con eficacia sin interrupciones técnicas en tu proceso. Saber cómo reducir el uso de la CPU puede ayudarte a optimizar durante una sesión especialmente intensa, algo vital para cualquier ingeniero de producción musical en ciernes.
A continuación, compartiremos varias estrategias probadas para mejorar el rendimiento de tu CPU y reducir la latencia en tu DAW.
8 formas de reducir el uso de la CPU de tu DAW
Desde ajustar la frecuencia de muestreo y el tamaño de los búferes hasta trabajar con unidades SSD, aquí tienes varias formas de maximizar los recursos de tu CPU mientras produces música.
Asegúrese de que todas las pestañas están cerradas
Parece sencillo, pero ten en cuenta que, aunque no los estés utilizando activamente, las pestañas y programas abiertos seguirán ocupando una valiosa capacidad de procesamiento que, idealmente, deberías dedicar a tu DAW. Si es posible, reinicia el ordenador y asegúrate de que todos los programas están cerrados antes de encender tu DAW.
Compruebe su hardware
Asegúrate también de solucionar los problemas de tu hardware: puedes utilizar un medidor de CPU para controlar el rendimiento y comparar y contrastar con tus distintos dispositivos. Tu interfaz de audio también puede aumentar la carga de tu CPU, así que no dudes en desconectarla cuando no la uses. Graba tantas partes en directo como puedas a través de tu interfaz de audio antes de añadir a tus sesiones plug-ins y efectos que consuman mucha CPU.
Además, asegúrate de tener todos los controladores de tarjeta gráfica adecuados para tu equipo: una simple actualización podría marcar la diferencia en tu rendimiento.
Ajuste el tamaño del búfer
El tamaño del búfer equivale a la cantidad de datos que tu DAW está procesando en un momento dado: un tamaño de búfer más bajo es ideal para grabar, ya que introduce una baja latencia con un tiempo de procesamiento más inmediato, mientras que un tamaño de búfer más alto puede reducir la CPU, ya que le das más tiempo al ordenador para renderizar la reproducción. Si ya has superado la fase de grabación de audio del proceso, puedes aumentar temporalmente el tamaño del búfer para ayudar a reducir la CPU, aunque ten en cuenta que puedes notar un ligero retraso en la reproducción.
En caso de apuro, puedes optar por reducir la frecuencia de muestreo para reducir la potencia de procesamiento necesaria. Sin embargo, ten en cuenta que esto afecta directamente al propio audio: una frecuencia de muestreo más baja conlleva un audio de menor calidad.
Imprime o congela tus pistas
Todas las pistas de tu sesión se renderizan cada vez que pulsas playback. Para reducir los retrasos y las pérdidas de audio, congela las pistas cuando no las estés utilizando. De esta forma, tu pista se reproducirá como si hubiera sido rebotada con su cadena de efectos actual, a la vez que te ofrece la flexibilidad de volver atrás y ajustarla si es necesario. Imprimir tus pistas también puede reducir el consumo de CPU, pero ten en cuenta que no podrás volver atrás y cambiar tus pistas una vez impresas.
Proporcionar flujo de aire adicional
Tu ordenador o portátil necesita ventilación para funcionar correctamente, sobre todo cuando utilizas programas que consumen mucha CPU, como un DAW. Asegúrate de que el ordenador está colocado sobre una superficie plana y fresca donde pueda obtener la ventilación que necesita. Si tienes acceso a herramientas informáticas básicas y los conocimientos necesarios, puedes revisar los ventiladores de forma semiperiódica para eliminar el polvo y los residuos acumulados que puedan estar ralentizando el rendimiento.
Por ejemplo, echa un vistazo a este tutorial sobre cómo limpiar los ventiladores del MacBook con un par de sencillas herramientas:
Rebotar la mezcla e iniciar una nueva sesión
Además de imprimir o congelar las pistas, a veces es mejor descartar una mezcla completa, sobre todo si vas a pasar a otra parte del proceso, como la masterización, o si necesitas una sesión en la que puedas grabar voces. Los plug-ins y VST pueden introducir latencia en la mezcla, lo que puede crear un retraso notable durante la grabación en directo, así que, en caso de duda, trabaja desde una nueva sesión.
Además, ten en cuenta que las pistas MIDI consumen más potencia de procesamiento que las pistas de audio y las bibliotecas de muestras, así que si estás seguro de un sonido, rebótalo a audio. Si no estás seguro, guarda una versión de tu sesión con los archivos sin procesar y otra con el audio rebotado: De este modo, siempre podrás volver a los archivos originales si es necesario.
Desactivar pistas no utilizadas
En lugar de omitir las pistas que no están en uso, desactívalas por completo para reducir recursos innecesarios. También puedes utilizar grupos de efectos, envíos y retornos en lugar de crear varias cadenas de efectos individuales para ayudar a reducir el uso de la CPU. Cuantos menos sistemas y pistas activas tengas en ejecución en un momento dado, más latencia tendrás.
Descubra más almacenamiento
La disponibilidad de almacenamiento (o la falta del mismo) también puede afectar al rendimiento. Acostúmbrate a hacer copias de seguridad periódicas de tus archivos y a eliminar los archivos grandes que no necesites con regularidad. Si trabajas con discos duros, opta por unidades de estado sólido, que suelen ser más fiables y duraderas que el típico disco duro.
Preguntas frecuentes sobre la optimización de la CPU de DAW
¿Estás preparado para sacar el máximo partido a tu estación de trabajo de audio digital? Aquí tienes un par de preguntas y respuestas frecuentes que debes tener en cuenta:
¿Las DAW utilizan CPU?
Las estaciones de trabajo de audio digital dependen en gran medida de la CPU para procesar tus pistas. Por este motivo, es mejor invertir en ordenadores o portátiles con varios núcleos e hilos para poder crear música de forma fiable.
¿Qué CPU necesito para la producción musical?
La cantidad de CPU que necesitas para la producción musical variará mucho en función del uso que hagas de plug-ins, elementos grabados en directo, entre otros factores. La mayoría de los profesionales de la música sugieren optar por un procesador multinúcleo con al menos cuatro núcleos para poder hacer música.
¿Cómo puedo optimizar mi CPU para DAW?
Existen varias estrategias, descritas anteriormente, que se pueden utilizar para mejorar tu CPU de modo que tengas más flexibilidad mientras grabas en directo. Algunas de las técnicas más comunes incluyen el ajuste de las frecuencias de muestreo, el tamaño de los búferes, y asegurarse de que tiene suficiente almacenamiento para apoyar su DAW.
¿Por qué mi DAW es tan lento?
Tu DAW puede ir lenta por muchas razones, pero uno de los males más comunes es tener poca potencia de procesamiento de sobra o CPU. Puedes utilizar las estrategias descritas anteriormente para reducir la CPU y liberar más espacio para hacer música.
Saber cómo optimizar tu estación de trabajo de audio digital es una habilidad esencial para cualquier músico. Utiliza estas estrategias para sacar el máximo partido a tu proceso de producción musical.