Los corridos tumbados se han convertido en uno de los géneros musicales mexicanos de mayor crecimiento. De hecho, en los últimos cinco años, el consumo mundial de corridos se ha disparado un 413%, con un aumento del 42% sólo el año pasado.
Natanael Cano, que es una figura clave en este movimiento, lo describió al LA Times como "regional mexicano como el que tú, o, no sé, tus padres solían escuchar; pero con un condimento más joven, un regional mexicano más joven".
Entonces, ¿qué tiene este género que atrae a los aficionados tanto en México como en el resto del mundo?
En esta guía, quiero echar un vistazo a los orígenes, la evolución y el impacto de los corridos tumbados, y tratar de arrojar algo de luz sobre cómo este giro moderno de la música tradicional ha tocado la fibra sensible del público de todo el mundo.
Los orígenes de los corridos tumbados
Para entender realmente de qué tratan los Corridos Tumbados, conviene comprender la evolución de la música mexicana en su conjunto. Durante años, la música regional mexicana ha dominado la escena, y en los últimos años, géneros como la Banda y el Mariachi han experimentado un gran aumento de popularidad, gracias a artistas como Banda MS y Vicente Fernández.
Sin embargo, la música mexicana es mucho más que géneros "regionales".
Como su nombre indica, Corridos Tumbados es una escisión del subgénero del corrido.
Entonces, ¿de dónde vienen los corridos?
Los corridos son básicamente baladas narrativas mexicanas que se cantan desde hace más de un siglo. Desde un punto de vista tradicional, cuentan historias de héroes, forajidos y luchas cotidianas. Se hicieron populares durante la Revolución Mexicana (1910-1917) como forma de narrar batallas y acontecimientos notables en canciones.
A lo largo del siglo XX, los corridos empezaron a incluir música norteña (con instrumentos como acordeones y guitarras de bajo sexto) y siguieron creciendo en popularidad al narrar historias de bandidos y narcotraficantes.
A finales del siglo XX surgieron los narcocorridos, con grupos como Los Tigres del Norte y Los Tucanes de Tijuana, que cantaban historias épicas sobre personajes reales de los cárteles. Estas canciones eran temáticamente descarnadas y a menudo controvertidas, aunque calaron en los oyentes al dar voz a las calles y a la actitud antisistema de la cultura mexicana.
Aparición de los Corridos Tumbados (Trap Corridos)
Hacia finales de la década de 2010, una nueva generación de artistas empezó a mezclar corridos tradicionales con influencias del hip-hop y la música trap, creando lo que ahora se denominan corridos tumbados, o corridos trap.
El término tumbado en español significa literalmente "derribado" o "tumbado", pero en el argot callejero mexicano implica algo con un estilo fresco y rebelde, como un lowrider. Tumbados" pretendía captar la actitud del género. Como señaló un periodista musical, el corrido tumbado se convirtió en una etiqueta de identidad para los jóvenes de ambos lados de la frontera entre México y EE.UU. a quienes les encanta el toque urbano de la música regional.
Esta fusión nació de forma orgánica.
Natanael Cano, un joven artista de Sonora (México), creció idolatrando a cantantes de corridos como Ariel Camacho (conocido por el estilo sierreño de dos guitarras y una tuba).
En 2018, Cano comenzó a lanzar canciones que sonaban a corridos clásicos a base de guitarra pero con un toque moderno. Su primer éxito fue "El de los Lentes Gucci", un corrido que ya insinuaba una arrogancia juvenil influenciada por el trap.
Tras mudarse a Los Ángeles y firmar con el sello independiente Rancho Humilde, Cano y sus colaboradores empezaron a mezclar la narración de corridos con ritmos de hip-hop. Según Danny Félix, guitarrista y productor que trabajó con Cano, un momento clave en el estudio fue cuando "propusimos cambiar los acordes de una canción de mayor a menor. Ahí nació el género... sucedió espontáneamente".
El estilo "tumbado " también implicaba la incorporación de elementos de hip-hop en la música y las letras. En los corridos tradicionales, el ritmo puede ser el de una polca o un vals, mientras que en los corridos tumbados puede oírse un ritmo de estilo trap o flujos similares al rap en las voces.
Billboard describe los corridos tumbados como "una variante del corrido tradicional que incorpora la sensibilidad del hip-hop tanto musicalmente (con versos y cánticos de rap) como temáticamente".
Esto significa que los cantantes a veces rapean o utilizan jerga urbana, y las canciones hablan de cosas que podrían tratar las canciones de rap, no sólo de historias de héroes populares. Los temas incluyen la vida callejera, la violencia, las fiestas, el sexo y el consumo de drogas, a menudo con letras contundentes y explícitas.
Artistas más populares de Corridos Tumbados
Aunque Cano es sin duda uno de los artistas más conocidos de la escena de los corridos tumbados, hay muchos otros artistas de corridos que se han convertido en pioneros de este subgénero.
He aquí algunos artistas notables que recomiendo explorar:
Junior H (Antonio Herrera Pérez)
Nacido en Guanajuato (México), Antonio "Junior H" Herrera Pérez llevaba la música corriendo por sus venas desde muy joven. Sin embargo, su camino en el mundo de la música no fue fácil.
Cuando era estudiante de secundaria, Junior H trabajaba como cocinero en un restaurante de comida rápida. Durante sus turnos y en su tiempo libre, aprendió a tocar la guitarra y el acordeón. Estas habilidades autodidactas sentaron las bases de su futura carrera.
Su carrera se disparó con los corridos melancólicos, infundidos de trap, que dieron al género un nuevo nivel de profundidad emocional y relatabilidad. Los álbumes de Junior H, incluido "Mi Vida En Un Cigarro" (2019), han acumulado cientos de millones de streams, y sus suaves voces Auto-Tuned combinadas con arreglos basados en guitarras acústicas dieron al género un toque único.
También grabó "Soy El Diablo (Remix)" con Natanael Cano, lo que contribuyó a consolidar aún más su lugar en la cima del género.
Peso Pluma (Hakim Monáe Pérez)
Nacido el 15 de junio de 1999 en Zapopan, Jalisco, México, Hassan Emilio Kabande Laija, conocido profesionalmente como Peso Pluma, ascendió rápidamente a la fama en la escena musical latina.
Creció en Guadalajara y empezó a tocar la guitarra a los 15 años viendo tutoriales en YouTube. Este enfoque autodidacta sentó las bases de su estilo musical único, que mezcla corridos sierreños tradicionales con elementos de la música urbana latina, incluidos el trap y el reggaeton.
La carrera de Peso Pluma despegó con el lanzamiento de su álbum de estudio debut, "Ah y ¿Qué?" en abril de 2020 bajo el sello El Cartel de los Ángeles. Le siguió "Efectos Secundarios" en marzo de 2021, con temas como "Con Dinero Baila el Perro" y "Lo Que Me Das". En abril de 2022 lanzó el EP "Sembrando " , que incluía el single "Sembrando".
Uno de los mayores hitos en la carrera de Peso Pluma fue su colaboración con Natanael Cano y Gabito Ballesteros en el tema "AMG" a principios de 2022. La popularidad de la canción en TikTok la llevó al Billboard Hot 100, lo que supuso la entrada de Peso Pluma en el mercado estadounidense.
Eslabón Armado
Formado en 2017 en Patterson, California, Eslabón Armado es un conjunto integrado por los hermanos Pedro Tovar (voz principal, guitarra de doce cuerdas) y Brian Tovar (bajo), junto a Ulises González (guitarra acústica) y Damián Pacheco (guitarra de doce cuerdas).
Los hermanos Tovar, junto con su amigo de la infancia Gabriel Hidalgo, empezaron explorando la música sierreña y otros estilos regionales mexicanos como el norteño. Ganaron atención a través de videos de actuaciones en vivo en YouTube y TikTok, lo que finalmente los llevó a un contrato con DEL Records. Su EP debut, "Navegando y Flotando", fue lanzado en octubre de 2019.
En marzo de 2023, lanzaron "Ella Baila Sola" con Peso Pluma, que alcanzó el número cuatro en la lista Billboard Hot 100 y el número uno en la lista Hot Latin Songs.
La controversia tras el género
Como muchos estilos musicales urbanos emergentes, los corridos tumbados han suscitado un gran debate.
Si nos fijamos en la historia, es bastante habitual que los nuevos géneros musicales se enfrenten a menudo al escrutinio. Por ejemplo, el auge del rock and roll en los años 50 fue criticado por grupos conservadores que lo consideraban una amenaza para las normas sociales.
Del mismo modo, la aparición del rap y el hip-hop en las décadas de 1980 y 1990 se enfrentó a reacciones negativas debido a su cruda representación de la vida urbana y a la percepción de que fomentaban la violencia.
Estos géneros, muy parecidos a los corridos tumbados de hoy en día, se consideraban reflejo de problemas sociales que algunos preferían pasar por alto.
En mayo de 2023, la ciudad turística de Cancún (México) saltó a los titulares al prohibir las actuaciones en directo de corridos tumbados. Las autoridades locales alegaron que estos géneros "promueven la violencia y la delincuencia".
La decisión provocó la cancelación de un concierto de El Komander, figura destacada de la escena del narcocorrido, justo un día antes de la fecha prevista. El secretario general del ayuntamiento, Jorge Aguilar Osorio, declaró que los actos públicos no deben respaldar la violencia, haciendo referencia a incidentes ocurridos en el pasado en este tipo de conciertos.
El contenido de los corridos tumbados suele ahondar en temas de narcotráfico, violencia y narcocultura. En un país con miles de muertes violentas, según datos oficiales, estas letras resuenan profundamente, pero también plantean cuestiones éticas. Mientras algunos sostienen que la música refleja la dura realidad, otros creen que glorifica la cultura de la violencia.
La polémica no es nueva. Durante décadas, los narcocorridos han estado prohibidos en varios estados mexicanos. Baja California, Chihuahua y Sinaloa han impuesto restricciones, alegando la preocupación de promover conductas delictivas. En 2017, el legendario grupo Los Tigres del Norte fue multado por interpretar narcocorridos en Chihuahua.
El debate ejemplifica el reto más amplio de equilibrar la libertad artística con la responsabilidad social.
Si bien los artistas deben tener derecho a representar narraciones auténticas y a conectar con su público, las comunidades y los gobiernos también deben encontrar formas de mitigar los contenidos que consideren que pueden incitar al daño.
El futuro de los corridos tumbados
Desde sus raíces en la tradición clásica del corrido hasta su transformación bajo la influencia del hip-hop y el trap, este género ha roto fronteras y desencadenado un movimiento que ahora llega a oyentes de todo el mundo.
Basta ver el éxito de artistas como Natanael Cano, Peso Pluma y Eslabón Armado para darse cuenta de que los corridos tumbados han redefinido la música regional mexicana y han dado lugar a una nueva forma de contar historias para la juventud de hoy.
Mientras los corridos tumbados siguen evolucionando y la controversia continúa, una cosa está clara: este género ha llegado para quedarse, y su influencia tanto en la música mexicana como en la mundial no hará sino crecer en los próximos años.