Como ocurre con la mayoría de los instrumentos en directo, la diferencia entre una batería que suena bien y otra que suena genial suele estar en cómo se microfonea el kit. Aunque tener una batería de calidad y afinada es igual de importante, hay que planificar cuidadosamente la estrategia de grabación.
Ahora bien, si estás empezando, probablemente te hayas arrancado algunos pelos de frustración por no poder conseguir que tu batería suene tan potente en la mezcla como en la sala. Y lo entiendo. Es fácil frustrarse cuando no sabes por qué tus grabaciones no captan lo que oyes en tu cabeza.
Ahí es donde va a entrar en juego esta guía. Como productor profesional e ingeniero de mezclas, he grabado baterías en directo en muchas situaciones. Con más de 10 años de experiencia a mis espaldas, quiero proporcionarte toda la información que tengo para que no tengas que pasar tanto tiempo en la fase de prueba y error.
Conocer la batería
Esta sección es más bien para los que no son bateristas pero quieren grabarlos. Cada pieza de un kit de batería tiene un papel que desempeñar, y la forma en que captures esas piezas del kit es lo que determinará el resultado global de tu grabación.
Echemos un vistazo a cada una de las piezas de la típica batería y por qué la colocación del micro es clave para sacarles el máximo partido a la hora de grabar.
Bombo
El bombo, o bombo, es la base de una batería, ya que proporciona una pegada de gama baja que a menudo encaja con el bajo. Para microfonear un bombo, necesitas un micrófono capaz de manejar frecuencias ultrabajas sin distorsionar.
La mayoría de los ingenieros optan por micrófonos dinámicos, como el Shure Beta 52A o el AKG D112, porque captan muy bien los graves. Cuando grabo, suelo colocar el micro justo dentro del bombo o ligeramente fuera, apuntando al centro del parche, para conseguir un sonido profundo y pleno. La proximidad del micro al bombo también ayuda a captar más ataque y definición, lo que puede ser especialmente útil en géneros como el rock o el metal.
Ahora, una nota al margen a medida que avanzamos en este artículo:
Soy muy consciente de que hay infinitas formas de grabar baterías, y cada persona tendrá su propia idea de un "sonido de batería perfecto". De hecho, uno de mis sonidos de bombo favoritos es el bombo de John Bonham, que a menudo se grababa con una combinación de Electro-Voice RE20 y Shure SM57, lo cual es bastante inusual.
Sin embargo, el objetivo de este artículo no es repasar todos los resultados posibles, sino más bien ofrecerte algunas sugerencias básicas y ayudarte a entender el "por qué", ¡para que puedas tomar decisiones experimentales más adelante si te decides!
Caja
La caja es tan importante como el bombo en muchos sentidos. Aunque cada caja suena de forma diferente, lo más habitual es captar el sonido brillante y ágil (que incluye la parte superior y los bordones de debajo).
Los micros dinámicos, como el Shure SM57, se utilizan a menudo para la microfonía de cajas porque pueden soportar altos niveles de presión sonora (SPL) y hacen un magnífico trabajo en la captación de rangos medios. En una situación con un solo micro, éste suele colocarse unos centímetros por encima de la cabeza de la caja, inclinado hacia el centro. Si coloca el micro demasiado lejos del tambor, corre el riesgo de perder parte de ese sonido ágil y nítido, por lo que la microfonía cercana es esencial en este caso.
Por supuesto, también es importante experimentar con la posición, ya que se busca un buen equilibrio entre el chasquido de la caja y el cuerpo del sonido.
Toms
También los hay de todos los tamaños y formas, y un mismo kit puede tener varios toms. Como principiante, yo me centraría en entender cuál es la función de los toms en la pista que estás grabando y microfonearlos todos de forma similar.
Una pista de la vieja escuela, al estilo Motown, puede no necesitar micrófonos de toms. Muchos ingenieros obtendrían el sonido de los toms de los micrófonos de techo o de los micrófonos de sala. Sin embargo, muchos ingenieros de pop, rock y country modernos microfonearán los toms para captar toda su profundidad y tono.
Los micrófonos dinámicos también suelen utilizarse para los toms. Algunos de los más populares son el Sennheiser e604 y el Audix D2. Cuando hago microfonía de cerca, suelo colocar el micro justo por encima del borde del tambor, ligeramente inclinado hacia el centro del parche.
Platos y Hi-Hats
Los platillos son la parte del kit más difícil de microfonear, sobre todo porque tienen un rango de frecuencias muy brillante y amplio y pueden arruinar fácilmente el sonido de toda la batería si los micrófonos están mal colocados.
Los micrófonos de condensador son una opción habitual para los overheads, ya que captan la gama alta, o shimmer, mucho mejor que sus homólogos dinámicos. El hi-hat, que es mucho más pequeño y sensible, también requiere un toque cuidadoso. Yo suelo utilizar un micro de condensador de diafragma pequeño colocado ligeramente por encima del borde del hi-hat para captarlo sin captar demasiado del resto del kit.
La importancia de tener una batería afinada
Uno de los mayores errores de novato es grabar la batería sin afinarla antes. No te voy a mentir. Si no eres un batería experimentado, afinar la batería puede ser difícil.
Sin embargo, la afinación puede influir mucho en el sonido de la batería en la grabación. Una batería demasiado afinada puede sonar áspera y sin cuerpo, mientras que una demasiado floja puede perder definición. Fíjate en el género que vas a grabar y fíjate en cómo afinan otros baterías para ese género para tener un punto de partida.
Los mejores micrófonos para grabar batería
No todos los micrófonos son iguales, y es importante que conozcas las diferencias entre los micrófonos dinámicos, de condensador y de cinta para que puedas elegir el más adecuado para cada parte de tu kit.
Micrófonos dinámicos
Los micrófonos dinámicos están diseñados para soportar altos niveles de presión sonora (SPL) sin distorsionar, por lo que son una opción muy popular para baterías, especialmente bombos, cajas y toms.
Pros:
- Duraderos y capaces de soportar altos niveles de presión sonora.
- Generalmente más asequibles que los micrófonos de condensador o de cinta.
- Menos sensibles, lo que significa que son excelentes para rechazar el ruido de fondo y el sangrado.
Contras:
- Son menos sensibles que los micrófonos de condensador o de cinta, por lo que es posible que no capten todas las sutilezas del tono de una batería.
- Respuesta en frecuencia limitada en comparación con los micrófonos de condensador.
Micrófonos de condensador
En cambio, los micros de condensador son más sensibles y precisos que los dinámicos. Por eso captan mejor todo el espectro sonoro. Tienen una respuesta en frecuencia más amplia y un mayor nivel de detalle, por eso muchos ingenieros los utilizan como micrófonos de techo y de sala.
Pros:
- Alta sensibilidad y capacidad para captar una amplia gama de frecuencias.
- Excelente para captar los matices y detalles sutiles de una batería.
- Ideal para micrófonos de techo y de sala.
Contras:
- Son más frágiles y menos duraderos que los micrófonos dinámicos, por lo que no soportan tan bien los altos niveles de presión sonora.
- Generalmente más caros que los micrófonos dinámicos.
Micrófonos de cinta
Aunque los micros de cinta son menos comunes, siguen teniendo un lugar en la grabación de baterías. Con una característica única de suavidad, son perfectos para capturar tonos de batería cálidos y naturales. Ten en cuenta que los micros de cinta pueden ser delicados, por lo que no los recomendaría para grabar a bateristas con mucha mano. Sin embargo, para un sonido vintage, no hay nada mejor.
Pros:
- Sonido natural y suave con un carácter suave y vintage.
- Excelente para captar las frecuencias medias y rechazar la dureza de los agudos.
Contras:
- Extremadamente frágiles, especialmente cuando se exponen a altos niveles de presión sonora, por lo que deben manipularse con cuidado.
- Menos común en la mayoría de las configuraciones de batería y puede ser caro.
Elegir los micrófonos adecuados en función de su presupuesto
Por suerte, hoy en día existen micrófonos de alta calidad a todos los precios. Aunque tengas un presupuesto limitado, podrás obtener resultados profesionales sin gastarte una fortuna.
- Opciones asequibles: Para micrófonos dinámicos, el Shure SM57 (para caja) y el AKG P2 (para bombo) son excelentes opciones. Para los overheads, recomiendo condensadores de diafragma pequeño como el Audio-Technica AT2021.
- Opciones de gama media: Aunque no se suele considerar un "micro de batería", soy un gran fan del Shure SM7B para las cajas, especialmente en la parte inferior. También puedes probar el Sennheiser e604 para toms, que ofrece un buen equilibrio entre coste y prestaciones. Para los overheads, el Rode NT1-A ofrece mucha claridad y detalle.
- Opciones de gama alta: Si buscas el mejor equipo, los Neumann U87 son ideales para los overheads y los Royer R-121 para la microfonía ambiental. Ten en cuenta que estos micrófonos captan todos los matices de la sala, por lo que si ésta no suena bien, no te servirá de nada comprar micrófonos caros.
Ahora bien, si tienes un presupuesto ajustado o simplemente no te apetece buscar un montón de micros diferentes para grabar, siempre puedes invertir en un kit de micros para batería.
Con ellos tendrás casi todo lo que necesitas para microfonear tu kit por una fracción del coste de comprar micros individuales. El Audio-Technica AT2020 Drum Pack, por ejemplo, incluye tres micrófonos dinámicos para la caja y los toms, además de un micrófono de condensador para los overheads. También puedes echar un vistazo al kit Shure DMK57-52, que incluye SM57 para la caja y los toms y un AKG P2 para el bombo.
Cómo elegir y colocar los micros para cada tambor
Ya tienes los micros listos, y el siguiente paso es decidir cómo colocarlos. Cada tambor y platillo requiere una colocación específica del micro, así que veamos las mejores prácticas para microfonear cada parte de tu batería.
Cómo microfonear el bombo
En mi opinión, para conseguir un buen bombo hay que captar tanto el peso de los graves como el agudo ataque que define el sonido del bombo.
Para captar el ataque del bombo (el "clic" agudo del batidor al golpear el parche), coloca el micro dentro del bombo, apuntando hacia el batidor. Así conseguirás un sonido definido y con garra, ideal para rock o pop.
Para conseguir un sonido más grave, coloca el micro justo dentro del bombo o cerca del orificio de ventilación (si el bombo tiene). De este modo, conseguirás el retumbar profundo y la plenitud que se suele oír en la música dance o electrónica.
Si quiere lo mejor de ambos mundos, considere usar una combinación de dos micros. Por ejemplo, puede utilizar el Shure Beta 52A justo fuera o cerca del orificio de sonido del bombo para los graves y otro buen micro de captación de graves, como un Shure Beta 91A, cerca del batidor para los clics.
Ten en cuenta que si decides utilizar varios micrófonos, debes tener en cuenta la cancelación de fase.
Consulta nuestra guía sobre la fase en audio para obtener más información.
Cómo microfonear una caja
El único problema de microfonear una caja es que no siempre hay mucho espacio entre los tambores, lo que limita la posición del micro. Sin embargo, colocar el micro en la posición correcta puede marcar la diferencia.
Muchos ingenieros prefieren microfonear sólo el parche superior de la caja, pero otros apuestan por los parches superior e inferior. El sonido que se obtiene de la parte superior de la caja se concentra en el cuerpo del tambor, especialmente si coloca el micro cerca del centro. A medida que acerques el micro al aro, captarás más los cables de la bordonera por debajo.
Suelo empezar con un micro dinámico, como un Shure SM57, colocado unos 5 cm por encima de la cabeza de la caja, unos 5 cm por dentro del borde, inclinado hacia abajo en un ángulo de 25 grados hacia el centro de la cabeza. Esta posición proporciona una gran combinación de pegada y claridad. Si quiero reducir los graves, alejo el micro del tambor o ajusto la posición lejos del centro.
Ahora bien, añadir un segundo micro debajo de la caja es estupendo si quieres más bordones. Sin embargo, para un principiante, esta técnica de "arriba y abajo" puede no ser necesaria. De hecho, muchos ingenieros que conozco la utilizan de forma selectiva. Un buen punto de partida es un equilibrio 80/20 entre los micros superior e inferior, con el micro superior como sonido dominante.
Para el micrófono bajo la nariz, puedes utilizar una variedad de micrófonos, como el Shure SM57, SM7B, o un condensador como el Audio-Technica AT4033A.
Sólo tienes que asegurarte de que, al configurar el micrófono inferior, se invierta la polaridad para evitar la cancelación de fase.
Cómo microfonear Toms
Antes de pasar a microfonear los toms, quiero reiterar rápidamente lo importante que es afinarlos primero. No tengo ni idea de cuántas grabaciones de aficionados he hecho en las que los toms suenan flojos o desconectados por culpa de una mala afinación.
Para microfonearlos, suelo utilizar el Sennheiser MD421. Capta los toms en todo su rango, y con un alto SPL, lo hace sin distorsión.
Para obtener un sonido concentrado con mucho ataque, suelo colocar un MD421 a unos cinco o seis centímetros por encima de cada parche de tambor, en un ángulo de 45 grados y apuntando directamente al centro del parche. Esto debería darle el ataque y la presencia más nítidos. Si quiere menos ataque y más timbre, puede colocar el micro más cerca del aro.
Ten en cuenta que si vas a microfonear varios toms, es importante que apuntes los micros en la misma dirección para evitar problemas de fase.
Cómo microfonear los hi-hats
El hi-hat es una pieza interesante del kit, ya que aunque produce predominantemente frecuencias altas más brillantes, también tiene una cantidad significativa de frecuencias bajas y medias. Éstas se notan especialmente cuando el micro se coloca más cerca de los platillos. Mi filosofía a la hora de microfonear el hi-hat (si es que tengo que hacerlo) es capturar el ataque de las baquetas sin perder la calidez y la resonancia de los platillos.
Si microfoneas el hi-hat desde abajo, por ejemplo, pierdes mucho ataque de baqueta, por eso suelo colocar mi micro de hi-hat a unos cinco o seis centímetros de la parte superior del plato, apuntando hacia donde golpea la baqueta. También se suele colocar a una pulgada del borde. Esta colocacion te dara mucho ataque sin mucho sangrado de otras piezas del kit.
En cuanto a la selección de micrófonos, me gustan los cardioides y supercardioides, ya que están más enfocados. Te recomiendo que eches un vistazo al Neumann KM-184 o al Shure-SM81, ya que su forma de lápiz facilita su colocación.
Ahora bien, dicho todo esto, casi nunca microfoneo el hi-hat a menos que sea una parte importante del sonido. Por ejemplo, una pista disco se nutre de un sombrero, y tener más control sobre su dinámica y matices puede ser útil en la fase de mezcla.
Cómo reducir los gastos generales
Los micrófonos de techo son los que utilizarás para unir todas las piezas de tu kit, así que yo diría que son bastante importantes.
Cuando prepare sus transparencias, tenga en cuenta que el objetivo debe ser captar una imagen cohesionada de la batería en su conjunto.
Los overheads también deben trabajar en armonía con los micrófonos cercanos para producir un sonido natural y unificado, en lugar de aislado. Hay muchas variables que entran en juego a la hora de colocar los micrófonos de techo:
- De izquierda a derecha (imagen estéreo): Un enfoque común es utilizar una configuración X/Y u ORTF para centrar los micrófonos overhead sobre la batería. Así se consigue una imagen estéreo equilibrada, con los platillos y los toms distribuidos uniformemente por la mezcla. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la caja puede acabar en un lado de la mezcla, lo que podría causar problemas al intentar centrarla con el micro de caja. Para resolver esto, puedes ajustar los micros para crear un "offset" en el campo estéreo.
- Punto focal (posicionamiento sobre el eje): También deberás decidir cuál es tu punto focal. Si quieres más presencia de los platillos, haz que sean el objetivo en el eje (apunta los micros directamente hacia ellos). Si, por el contrario, prefieres más cuerpo en los overheads, enfoca los micros hacia la batería. También puedes encontrar un equilibrio entre los platillos y la batería para obtener lo mejor de ambos mundos.
- De delante a atrás: La posición de los micros en relación con la parte delantera y trasera del kit también influye mucho en el sonido. Si mueves los micros hacia delante, captarás más los platillos y los toms de rack. En cambio, si los desplazas hacia atrás, los acercarás más a la caja y a los toms de suelo.
- Arriba y abajo (ajuste de altura): Por último, la altura de los micros puede cambiar drásticamente el tono general. Los micrófonos más bajos captarán un sonido más directo y ajustado, mientras que los micrófonos más altos aportarán más ambiente a la sala y darán a la grabación una sensación más abierta y completa. También puedes ajustar la altura de los dos micros de forma independiente para compensar las diferencias en el tiempo de llegada del sonido de las distintas partes del kit.
Cómo microfonear una habitación
Por último, tenemos los micrófonos de sala, que se utilizan para dar sensación de espacio y ambiente natural. Los micrófonos de sala son diferentes de los de techo, ya que ayudan a captar los reflejos y la reverberación del propio espacio. Empezaré diciendo que si trabajas en una sala con mala acústica o un sonido seco y sin vida, puede que los micrófonos de sala no te proporcionen el ambiente natural que esperabas.
En ese caso, siempre puedes añadir un sonido de sala falso más tarde, durante la fase de mezcla, utilizando un plugin de reverberación por convolución como Altiverb, Valhalla Room o FabFilter Pro-R 2.
Dicho esto, si tienes una habitación decente en la que grabar, la forma más sencilla de capturarla es con un único micrófono de habitación colocado en un punto estratégico de la sala.
Para obtener un sonido amplio y ambiental, me gusta colocar el micrófono de sala cerca de la pared opuesta, lejos de la batería. Apúntalo hacia la pared trasera de la sala para captar su reverberación natural. De esta forma, enfatizarás el espacio sin que se produzca un sangrado directo de los platillos.
Un buen punto de partida suele ser a dos metros del kit y a la altura de la cabeza. Esta posición le dará una perspectiva similar a la que podría escuchar un oyente medio.
Ahora, por otro lado, si quieres un sonido de sala más personal e íntimo, puedes probar a colocar el micro de sala a sólo medio metro por detrás de la cabeza del batería. Esta proximidad puede capturar el sonido de la batería con una fuerte sensación de la sala que la rodea.
Reflexiones finales
Ahora que ya tienes las herramientas y técnicas para microfonear tu batería como un profesional, es hora de ponerlas en práctica.
Una vez que te sientas cómodo con los conceptos básicos anteriores, empieza a experimentar con distintas técnicas. No tengas miedo de probar configuraciones inusuales o de probar distintos micros en baterías en las que no tienen por qué estar. Ten en cuenta que cada batería y cada sala responden de forma diferente, así que tómate tu tiempo para probar cosas nuevas y confía en tus oídos.
¡Feliz grabación!