Una de las partes más difíciles del proceso creativo es saber por dónde y cómo empezar. Escribir canciones es más fácil para unos que para otros, pero cualquiera puede dedicarse a escribir música si tiene la confianza y los medios para empezar.
Hemos recopilado nueve métodos diferentes para aprender a empezar una canción. A continuación, te guiaremos en el inicio del proceso de composición y compartiremos un par de consejos para que puedas crear sin límites. Empecemos.
Cómo escribir una canción
Si es la primera vez que escribes una canción, la experiencia puede ser, como mínimo, desalentadora. Al fin y al cabo, tenemos la expectativa natural de que seremos capaces de escribir una canción igual que nuestros artistas favoritos de buenas a primeras.
Sin embargo, la realidad es que el proceso de composición puede llevar muchos años, sobre todo porque intervienen muchos componentes diferentes. Cuando decides crear una nueva canción, tienes que elegir progresiones de acordes, escribir la letra, el título, encontrar la melodía perfecta... y la lista continúa.
La cuestión principal es que empezar a componer puede ser abrumador, pero no dejes que eso te desanime. Puedes facilitarte un poco el trabajo si te comprometes a seguir un método de composición y te ciñes a él. A menudo, lo único que necesitamos para dar rienda suelta a nuestra creatividad es el valor de empezar a escribir.
A medida que adquieras experiencia, podrás probar otros puntos de partida o idear tus propios métodos. Escribir una canción no es fácil, pero tienes todo lo que necesitas para crear tus propias ideas musicales. Tus compositores favoritos también tuvieron sus primeras canciones, que probablemente no fueron increíbles, pero les llevaron a donde están hoy.
La mentalidad lo es todo: antes de sentarte a escribir, recuérdate a ti mismo tus capacidades para poder centrarte más en la música.
Cómo empezar una canción: 9 métodos diferentes
Sin más preámbulos, aquí tienes nueve formas diferentes de empezar a escribir canciones. Si un método no te convence, pasa al siguiente. No hay reglas cuando se trata de música. Cualquier cosa que te haga empezar a crear merece la pena ser explorada.
1. Construir una ranura
Una de las formas más intuitivas de empezar una canción es partiendo de un elemento rítmico de la música. Para ello, puedes crear un ritmo básico, buscar un bucle de batería o simplemente tocar con las manos al compás de un tempo. Durante este proceso, asegúrate de utilizar un metrónomo en línea que te ayude a mantener el ritmo.
Una vez que cojas el ritmo, puede que te vengan a la cabeza ideas melódicas. Sigue grabando con tu aplicación de notas de voz y deja volar tus ideas.
2. Empezar con una progresión de acordes
Las progresiones de acordes son la base de muchas canciones, lo que las convierte en una poderosa herramienta para componerlas. Coge tu instrumento favorito y desplázate hasta una progresión de acordes común. A veces, simplificar las cosas puede facilitarte mucho las primeras etapas de una canción.
Si no tocas ningún instrumento, puedes buscar bucles de progresión de acordes gratuitos en un sitio de muestras o en YouTube.
3. Elige la estructura de tu canción
Las estructuras creativas pueden hacer mucho más accesible la composición de canciones. Algunos de los tipos de estructura más comunes son verso-coro-verso-coro-puente-coro o, simplemente, verso-coro-verso-coro. Si empiezas por la estructura de tu canción, podrás empezar a rellenar los huecos que faltan.
En algunos casos, puede tener sentido escribir una canción de una sola sentada. En otros casos, puedes trabajar el estribillo un día y los demás elementos otro.
4. Escribir letras
Una canción no tiene que empezar necesariamente con un elemento melódico. Si te resulta más natural, crea primero la letra. Céntrate en crear frases que cautiven la atención del oyente a través de la vulnerabilidad y la narración honesta de historias.
Además, intenta crear una cadencia similar a la que emplearías al escribir poesía: crear un sentido del ritmo mientras escribes la letra hará que te resulte mucho más fácil poner música a las palabras a medida que avanzas.
5. Comenzar con una nota
Aunque seas nuevo en esto de crear música, puedes empezar tu canción con algo tan sencillo como una sola nota. Empieza cantando cualquier tono que se te ocurra. A partir de ahí, puedes empezar a ponerle letra a esa nota y empezar a encadenar las piezas de una canción o melodía. La clave de este método es darse el tiempo suficiente para materializar una idea.
6. Superponer algunos bucles
Si tienes acceso a un DAW, puedes empezar rápidamente una canción superponiendo algunos bucles. Arrastra un bucle de batería, una idea melódica e incluso una progresión de acordes. Las líneas de bajo también pueden ayudarte a inspirarte rápidamente.
7. Buscar una pista de referencia
Una forma estupenda de aprender a escribir una canción es ver un buen ejemplo. Los temas de referencia no sólo sirven de excelente inspiración, sino que también pueden ayudarte a desentrañar la magia de componer canciones en poco tiempo. La próxima vez que escuches tus canciones favoritas, dedica tiempo a diseccionar cómo se creó la pieza.
¿Qué tipo de estructura tenía la canción? ¿Cómo pasó el artista de una sección de la canción a otra? Aplica estas ideas a tus propias creaciones para mejorar tu música. Intenta escuchar cómo las diferentes estructuras melódicas crean distintos estados de ánimo en la música. Si has estudiado un poco de teoría musical, también puedes utilizar el concepto básico de movimiento mel ódico para ayudarte a rellenar los huecos entre las distintas secciones de la canción.
8. Crear una melodía o un riff
Una parte melódica o un riff potentes pueden servir de base para una canción. Toca tu instrumento, o incluso tu voz, y a ver qué se te ocurre. Puedes grabar varias ideas en notas de voz y reproducirlas para ver qué encaja. Los riffs suelen acabar formando parte del estribillo o el gancho de la canción, pero no dudes en experimentar con la ubicación de la melodía a lo largo de la composición.
9. Colaborar con otros
Una de las habilidades más importantes como músico es aprender a colaborar con otros creadores. Afortunadamente, esto también sirve como otra forma estupenda de poner en marcha una nueva canción. Organiza una sesión con un amigo que toque la guitarra, cante o escriba letras. También puedes colaborar a distancia y encontrar músicos con los que trabajar a través de las redes sociales si no tienes una comunidad local.
5 consejos adicionales para componer canciones
Ahora que ya has empezado tu canción, es hora de llevarla a cabo. Aquí tienes otros cinco consejos para guiarte en el proceso.
Mantenga la calma
Cuando se trata de procesos creativos como la composición de canciones, uno se puede interponer rápidamente en su camino. La música es una de las pocas habilidades que pueden ser en gran medida intuitivas, por lo que no siempre se puede pensar para componer una gran canción. Cuando te sientes a componer, intenta que tus ideas fluyan sin analizarlas demasiado.
La práctica hace al maestro
Incluso los grandes compositores de hoy en día han escrito música pobre. Si tu primera canción no es tu favorita, recuerda que sigue siendo un trampolín para mejorar la siguiente. Lo mejor que puedes hacer para mejorar tus habilidades como músico es mantenerte constante y persistente, sobre todo cuando la cosa se complica.
Tómese su tiempo para inspirarse
Escribir una canción potente sin fuentes de inspiración es todo un reto. Para mejorar es necesario escribir música de forma constante, pero también es importante tomarse descansos cuando se siente la necesidad de hacerlo. La inspiración puede llegarte en cualquier parte: viendo tu película favorita, yendo de excursión o pasando tiempo con tus seres queridos, tomarte un tiempo libre puede ayudarte a crear canciones diferentes. Es necesario tener una entrada para tener una salida.
Buscar opiniones
Pedir opiniones sobre una canción es increíblemente valiente. Al fin y al cabo, las canciones contienen algunos de nuestros sentimientos y pensamientos más vulnerables. Si consigues armarte de valor, verás cómo tu forma de componer se dispara. Aunque no conozcas personalmente a ningún músico experto, hay muchos hilos en Internet donde puedes buscar consejo. Puede que de paso conozcas a un par de nuevos colaboradores.
No te rindas
Una canción empieza cuando decides crearla. Convertir el material en bruto en una composición completa puede llevar algo de práctica, pero sin duda te resultará más fácil con el tiempo. En los momentos de duda, recuerda lo lejos que has llegado.
Cualquiera puede ser compositor
Aprender a crear una canción desde cero puede resultar difícil a veces, pero esperamos que estas estrategias te faciliten la exploración de tu creatividad interior. Recuerda que todo el mundo empieza de alguna parte, y que una canción empieza siempre que pones tu energía y esfuerzo en ella. Diviértete convirtiendo tus ideas en música.