La masterización es un paso esencial en la creación de audio profesional. Al fin y al cabo, es el último paso en el proceso de producción de audio, que permite a los ingenieros de sonido dar a las pistas un pulido final antes de enviarlas a la radio.
Sin embargo, muchos principiantes tienen dificultades para crear su primera cadena de señales de masterización. Por suerte, el proceso de masterización no es tan complicado, sólo requiere algunas herramientas clave y mucha práctica. A continuación, detallaremos una cadena de masterización básica para que puedas ayudar a que tu mezcla suene increíble.
¿Qué es la masterización?
Para mejorar correctamente tus canciones, tienes que conocer a fondo los objetivos de la masterización. En términos generales, el objetivo del proceso de masterización es producir una versión más equilibrada y mejorada de la mezcla final, lista para ser reproducida en la radio y otros medios. Un ingeniero de sonido utiliza herramientas como la imagen estéreo, la compresión multibanda y un ecualizador dinámico para hacer cambios sutiles pero importantes, de modo que una canción pueda sonar lo mejor posible cuando se pruebe en una variedad de salidas de audio y dispositivos de reproducción.
La masterización suele ser un proceso más técnico que la mezcla, en el que no se toman tantas decisiones creativas. En cambio, el ingeniero de masterización utiliza sus cadenas de masterización para elevar el sonido preestablecido en una mezcla bien equilibrada. Una canción correctamente masterizada tendrá una distribución más o menos uniforme cuando se analiza a través de un espectro de frecuencias, y por lo general suena bien cuando se escucha en servicios de streaming, en radios de coches, en equipos de música de discotecas, etc.
¿Qué es una cadena de señal de masterización?
Incluso si planeas entregar tus mezclas a un ingeniero de masterización o a un software como Emastered, es una buena idea tener una comprensión básica de cómo funciona el proceso para informar a tu mezcla. Una cadena de señal de masterización es simplemente una forma de categorizar el orden de los plugins de masterización dentro de la sesión de masterización de un ingeniero. Las cadenas de señal pueden variar en orden de un ingeniero a otro, pero por lo general, contienen el mismo tipo de plugins esenciales de la cadena de masterización.
Cómo construir tu cadena de señal de masterización: Guía paso a paso
¿Estás listo para crear tu propia cadena de masterización en tu DAW? Coge tus plugins de masterización y ¡manos a la obra!
- Puesta en escena de la ganancia
- Limpieza del ecualizador
- Compresión multibanda y de cola
- Realce tonal
- Imágenes estereoscópicas
- Limitación
- Medición
1. Asegúrate de que tienes una buena base para tu cadena de señal con escalonamiento de ganancia
Antes de empezar a añadir plugins a tu cadena de masterización, es importante tener en cuenta el gain staging. Aunque este término puede sonar confuso, se trata básicamente de una forma de monitorizar los niveles de salida de audio para evitar el desarrollo de distorsiones desagradables a lo largo del proceso de producción de audio. Tu mezcla no debería saturarse ni producir distorsiones no deseadas, lo que normalmente significa que su amplitud total no debería superar los 0 dB en el ámbito digital.
Teniendo esto en cuenta, recuerda que la masterización implica más compresión y una limitación más agresiva, por lo que es vital que tú o tu ingeniero de masterización dispongáis de lo que se denomina headroom. Lo ideal es que los sonómetros marquen entre -18 y -3 dB antes de enviar el sonido a masterizar. Si no te tomas el tiempo necesario para evitar la saturación en la mezcla, es imposible realizar una masterización profesional. Si tienes dificultades para analizar tus medidores de picos reales o de sonoridad, el uso de un plugin de escalonamiento de ganancia en tu bus maestro puede facilitarte la tarea de ver qué frecuencias altas, medias o bajas necesitas reducir.
También puede ser útil que los ingenieros de masterización pidan pistas de referencia al artista o productor. Así pueden comparar activamente su masterización con el objetivo deseado. La mejor masterización es una masterización informada y adaptable que se adapta a las necesidades de la música, en lugar de comprometerse ciegamente con los mismos ajustes y la misma cadena de plugins mezcla tras mezcla.
2. Limpieza del ecualizador
Aunque la colocación del ecualizador a lo largo de la cadena de masterización es subjetiva (como ocurre con cualquier plugin), es importante ecualizar el master para producir el nivel más uniforme posible de equilibrio tonal. Cualquier cambio realizado con el ecualizador debe servir para igualar los rangos de frecuencia de la mezcla sin comprometer el potente sonido y la dinámica creados en la mezcla.
Si tiene que eliminar más de 3 decibelios de las frecuencias altas, medias o bajas, probablemente sea señal de que hay un problema con la mezcla. De hecho, las frecuencias problemáticas deben abordarse en la mezcla en la medida de lo posible, ya que la masterización sirve principalmente para amplificar las decisiones tomadas en el proceso de mezcla, en lugar de para solucionarlas.
También es posible que su bus maestro tenga múltiples ecualizadores a lo largo del orden de la cadena de masterización. Por ejemplo, un plugin de distorsión armónica puede sacar un sonido deseado de forma natural para una parte del espectro de frecuencias, pero crear frecuencias problemáticas en otra parte de la respuesta en frecuencia. Por lo tanto, para mitigar esto, es posible que tenga que utilizar un ecualizador después del plugin de distorsión armónica, incluso si ya ha utilizado un ecualizador anteriormente.
Como ya habrás notado, no hay reglas fijas para la masterización, sólo principios generales que informan el proceso. Tu técnica debe ser en gran medida individual con cada canción.
En esta fase del proceso, también puedes utilizar herramientas como un de-esser para limpiar las frecuencias altas innecesarias. De nuevo, deberás ser sutil en este punto: comprimir las frecuencias altas con demasiada dureza con un de-esser puede llevar a sobrecomprimir la mezcla, sacrificando la dinámica del sonido. Por encima de todo, confía en tus oídos y en tus medidores para determinar los puntos problemáticos mientras procesas los efectos.
3. Compresión multibanda y de cola
Gran parte del arte de la masterización se remonta a la compresión. Ya se trate de compresión dinámica paralela, compresión de cola o compresión para producir una distorsión armónica sutil, se trata de bajar el volumen de las partes más ruidosas de una pista y amplificar la sección que menos se oye de una mezcla para ayudarte a crear una sensación de mayor volumen que sea consistente en toda la pista.
Los ajustes de compresión deben afinarse para obtener un sonido más consistente sin sacrificar demasiada dinámica. También es aconsejable utilizar distintos tipos de compresión. Por ejemplo, un compresor de cola puede utilizarse para ayudar a "gelificar" más las partes individuales, mientras que un compresor multibanda puede amplificar determinadas secciones del espectro de frecuencias. Ten en cuenta que los servicios de streaming suelen añadir cierto grado de compresión a las canciones para que la experiencia de escucha sea más coherente, así que puede ser conveniente ajustarse a esta norma.
4. Realce tonal
También es posible que ciertos compresores emulen un sonido de válvulas, añadan color a la mezcla o produzcan una emulación de cinta mediante la saturación. Estos compresores más creativos también pueden utilizarse para resaltar las mejores partes de una pista, aunque todo debe utilizarse con moderación para evitar borrar el sonido general. A veces, añadir distorsión armónica no es necesario, pero los mejores ingenieros de masterización saben cómo añadir un poco de picante extra cuando es necesario.
5. Imagen estereoscópica
Aunque este paso es opcional, muchas veces un ingeniero de masterización utiliza un plugin de imagen para aumentar la amplitud estéreo percibida de un sonido. La expansión estéreo puede ayudar a que la música resulte más envolvente, aunque hay que tener cuidado para evitar problemas de fase involuntarios. Utilizar un medidor de correlación puede ayudarte a identificar rápidamente estos puntos problemáticos.
En la otra cara de la moneda, algunos ingenieros pueden querer limitar el campo estéreo para ayudar a que una canción exista en un espacio sonoro muy específico. En cualquier caso, debes comprobar la compatibilidad mono para asegurarte de que se detectan los problemas de fase antes de enviar el master.
6. Limitación
La última parte del proceso de masterización es la limitación. Un limitador es como un compresor ultracompacto, y los mejores profesionales de la masterización saben que estas potentes herramientas deben utilizarse con moderación y cuidado en una pista. Al limitar, el objetivo debe ser una reducción de ganancia de unos 2-3 dB. Sin embargo, los distintos géneros musicales pueden prestarse a un sonido más o menos comprimido, así que asegúrate de estar al día de las normas de cada pista en particular. Tu pista debe sonar consistente y realzada sin perder potencia dinámica (Notarás que esto es muy similar al enfoque de procesado que se aplica a los compresores).
7. Medición
El último paso de la masterización consiste en comprobar el master para asegurarte de que cumple todas las normas necesarias para los puntos de reproducción. La pista debe estar entre -16 y -20 LUFS. También puedes utilizar medidores de picos reales para determinar si la pista se cortará o no al reproducirla en equipos analógicos o digitales. También es una buena idea comprobar los medidores de correlación de tu master. Si la canción se inclina más hacia -1 que hacia +1, lamentablemente, tienes algunos problemas del pasado que debes solucionar.
Es recomendable que pruebes tu master en la reproducción a través de las salidas digital y física para detectar cualquier error de sonido. Una vez que hayas completado este paso, habrás terminado tu primer master.
Recuerde que las mejores prácticas de masterización se ciñen a las necesidades de la música. El procesado no puede reducirse a un método objetivo, ya que es imposible clasificar todas las mezclas de música en el mismo espacio sonoro. Céntrate en crear equilibrio y mejorar cada mezcla en la que trabajes mientras masterizas música.
Preguntas más frecuentes
Si todavía te cuesta entender cómo se construye una cadena de masterización, aquí tienes una serie de preguntas y respuestas frecuentes que te ayudarán a comprenderlo mejor.
¿Qué debe haber en una cadena de masterización?
Al igual que la mezcla, la masterización puede ser muy subjetiva. Teniendo esto en cuenta, las cadenas de masterización suelen tener un par de grupos de plugins en común: compresores, ecualizadores, limitadores y, potencialmente, plugins de imagen estéreo y otras herramientas creativas como excitadores. Los plugins no son el único aspecto importante de la cadena, también es clave determinar el orden preferido de los plugins.
¿Dónde va el excitador en la cadena de masterización?
Es una cuestión de preferencia personal, pero muchos ingenieros prefieren utilizar esta herramienta creativa, a menudo opcional, hacia el final de la cadena de señalización. Recuerde que los excitadores también pueden utilizarse en el proceso de mezcla en stems individuales en lugar de en la mezcla completa.
¿Debes comprimir o ecualizar primero?
La cuestión de comprimir o ecualizar primero es muy subjetiva y depende del contexto de la mezcla. Dicho esto, puede tener sentido utilizar primero un ecualizador sustractivo, ya que las frecuencias agudas que se compriman sólo se amplificarán. Aunque no es raro que los ecualizadores vayan antes y después de un compresor dependiendo de la situación.
¿Dónde se pone el limitador en una cadena?
Un limitador debe ser el último paso de la cadena de masterización. Un limitador es como un compresor ultrapotente. Por lo tanto, un limitador debe utilizarse con moderación para que la mezcla se amplifique, pero siga siendo dinámica. También tendrás que vigilar los niveles para poder enviar correctamente el master a las plataformas de streaming.
¿Cuándo debo utilizar un excitador?
Un excitador es un complemento que añade una sutil distorsión armónica a una mezcla para resaltar una parte o sección del espectro de frecuencias. No es necesario utilizar un excitador en la cadena de masterización, pero puede ser conveniente utilizarlo antes de cualquier ecualizador por si el excitador conduce a frecuencias no deseadas.
¿Qué plugins debo utilizar para masterizar?
Los plugins específicos que utilices en masterización son una cuestión de preferencia personal. Dicho esto, querrás usar compresores, ecualizadores, potencialmente saturadores, herramientas de ampliación estéreo y limitadores. La mayoría de las versiones básicas de plugins de masterización vienen gratis con casi todos los DAW populares.
El master de una canción es tan bueno como la cadena de señal de masterización y el ingeniero que hay detrás. Esperamos que esta guía paso a paso te facilite la tarea de hacer que tus propias canciones suenen bien y te sirva de base para tus diseños a lo largo del proceso de producción musical. ¡Feliz masterización!